El auge de los alquileres turísticos ha generado debates en numerosas comunidades de propietarios. La convivencia entre residentes permanentes y turistas ocasionales puede derivar en conflictos, lo que ha llevado a la implementación de regulaciones específicas.
Marco legal actual
A partir del 3 de abril de 2025, entrará en vigor una modificación en la Ley de Propiedad Horizontal que otorga a las comunidades de propietarios mayor control sobre las actividades de alquiler turístico. Según esta reforma, será necesaria la aprobación expresa de la comunidad, con una mayoría de tres quintos, para que un propietario pueda destinar su vivienda a fines turísticos. Esta medida busca equilibrar los intereses de los residentes y regular el impacto del turismo en zonas residenciales.
Implicaciones para propietarios y comunidades
- Para los propietarios: Antes de iniciar actividades de alquiler turístico, deberán obtener la autorización correspondiente de la comunidad. La falta de esta aprobación puede conllevar sanciones y la obligación de cesar la actividad.
- Para las comunidades: Se les otorga la facultad de regular o prohibir el alquiler turístico, considerando aspectos como la seguridad, la convivencia y el uso adecuado de las instalaciones comunes.
Pasos a seguir para regular el alquiler turístico
- Convocatoria de junta: Incluir en el orden del día la propuesta de regulación o prohibición del alquiler turístico.
- Votación: Se requiere una mayoría cualificada de tres quintos de los propietarios que representen las tres quintas partes de las cuotas de participación.
- Modificación de estatutos: En caso de aprobación, se deberá reflejar la decisión en los estatutos de la comunidad e inscribirla en el Registro de la Propiedad para su plena eficacia.
El rol de Avant en la regulación
En Avant, entendemos la importancia de mantener la convivencia y el buen funcionamiento de las comunidades de propietarios.
Nuestro equipo puede ayudar a las comunidades a implementar controles de acceso, garantizar el cumplimiento de las normas y mantener la seguridad y el bienestar de todos los residentes.

Ejemplo práctico de propiedad gestionada
En una comunidad de propietarios ubicada en el barrio de Chamberí (Madrid), la junta aprobó recientemente una regulación específica para el alquiler turístico tras varias reuniones en las que se debatió el impacto del turismo en la calidad de vida de los residentes. La principal preocupación eran las quejas por el ruido y los problemas de seguridad derivados de los alquileres a corto plazo. Después de implementar una nueva política de control de accesos, la comunidad experimentó una mejora notable en la convivencia, con un ambiente más tranquilo y seguro para todos.
Es esencial que las comunidades de propietarios se informen adecuadamente y actúen conforme a la legalidad vigente para garantizar una convivencia armoniosa y el respeto a los derechos de todos los implicados.
Contar con un socio como Avant permite a las comunidades afrontar este desafío con tranquilidad y eficacia.