Descubre las diferencias entre mantenimiento preventivo y correctivo, sus ventajas y cuál es mejor para tu edificio. AVANT te ayuda a optimizar tus instalaciones
El mantenimiento de los edificios es una tarea esencial para garantizar su seguridad, funcionalidad y eficiencia a largo plazo. Sin embargo, una de las decisiones más importantes que deben tomar los administradores, propietarios o gestores de instalaciones de edificios o comunidades, es elegir entre el mantenimiento preventivo o el correctivo.
En este artículo te explicamos las diferencias, ventajas y cuándo conviene aplicar cada uno, para ayudarte a optimizar los recursos de tu edificio y alargar la vida útil de sus instalaciones.
¿Qué es el mantenimiento preventivo?
El mantenimiento preventivo consiste en realizar inspecciones, limpiezas, ajustes y sustituciones programadas antes de que aparezcan fallos o averías. Su objetivo principal es prevenir incidencias, garantizando que los sistemas funcionen correctamente y se eviten costes innecesarios en reparaciones urgentes.
Características del mantenimiento preventivo:
- Se realiza de forma planificada y periódica (mensual, trimestral, anual…).
- Requiere una programación previa de revisiones e intervenciones.
- Involucra inspecciones técnicas, calibraciones y limpieza de equipos.
- Se apoya en protocolos y registros para hacer seguimiento de cada actuación.
Ejemplos de mantenimiento preventivo:
- Revisión periódica de sistemas eléctricos y cuadros de distribución.
- Limpieza y control de filtros en equipos de climatización (HVAC).
- Comprobación de ascensores, bombas de agua o sistemas de presión.
- Inspección de tejados, canalones y fachadas para evitar filtraciones.
- Verificación del sistema contra incendios o alarmas de seguridad.
¿Qué es el mantenimiento correctivo?
El mantenimiento correctivo, en cambio, se realiza cuando el fallo ya ha ocurrido. Es decir, se actúa una vez que se detecta una avería o daño en un sistema o equipo.
Aunque puede parecer una opción más económica a corto plazo, no planificar el mantenimiento y esperar a que algo falle puede implicar mayores costes, interrupciones del servicio y riesgos para los usuarios del edificio.
Características del mantenimiento correctivo:
- Se realiza tras la aparición de una avería.
- Suele requerir intervenciones urgentes o no planificadas.
- Puede implicar costes elevados por repuestos o mano de obra inmediata.
- Puede generar tiempos de inactividad en las instalaciones.
Ejemplos de mantenimiento correctivo:
- Reparación de una bomba de agua que deja de funcionar.
- Sustitución de un motor de ascensor averiado.
- Cambio de componentes eléctricos tras una sobrecarga.
- Reparación de climatizadores que dejan de enfriar en pleno verano.

Mantenimiento preventivo vs correctivo: principales diferencias
La principal diferencia entre el mantenimiento preventivo y el mantenimiento correctivo radica en el momento de la intervención.
Mientras el primero se realiza antes de que aparezcan los fallos, el segundo actúa cuando el problema ya se ha producido.
El mantenimiento preventivo es planificado, continuo y busca anticiparse a las averías para mantener los equipos en óptimas condiciones. Requiere revisiones periódicas, limpieza, ajustes y sustitución de piezas antes de que se deterioren.
Aunque implica una inversión inicial moderada, a largo plazo reduce los costes al evitar reparaciones urgentes, prolonga la vida útil de las instalaciones y minimiza interrupciones en los servicios.
Por el contrario, el mantenimiento correctivo se aplica cuando ya existe un fallo o avería. Suele implicar intervenciones urgentes, no planificadas, y por tanto costes más elevados en repuestos y mano de obra. Además, puede generar tiempos de inactividad, incomodidad para los usuarios y un mayor desgaste general del edificio.
En términos de seguridad y confort, el mantenimiento preventivo ofrece mayores garantías, ya que permite detectar posibles riesgos antes de que afecten a las personas o las instalaciones. En cambio, depender únicamente del mantenimiento correctivo aumenta la probabilidad de incidentes y reduce la eficiencia general del edificio.
Ventajas del mantenimiento preventivo en edificios
El mantenimiento preventivo es la mejor estrategia para garantizar la seguridad, eficiencia y ahorro en cualquier edificio, ya sea residencial, corporativo o industrial.
1. Mayor vida útil de las instalaciones
Las revisiones periódicas evitan el desgaste prematuro y prolongan el funcionamiento de los sistemas.
2. Reducción de costes imprevistos
Evitar averías graves implica ahorros importantes en reparaciones de urgencia y sustitución de equipos.
3. Planificación y control
Con un plan de mantenimiento preventivo puedes controlar los costes anuales y evitar sorpresas.
4. Sostenibilidad y eficiencia energética
Un mantenimiento adecuado mejora la eficiencia de los sistemas, reduce el consumo y contribuye a un edificio más sostenible.
5. Seguridad y bienestar
Los equipos eléctricos, ascensores o sistemas contra incendios deben cumplir con la normativa y funcionar correctamente para proteger a los usuarios.
¿Cuándo conviene aplicar el mantenimiento correctivo?
Aunque el mantenimiento preventivo es la opción más recomendada, el correctivo también tiene su lugar.
Puede ser adecuado en equipos de bajo valor o no críticos, donde una reparación puntual no afecte al funcionamiento global del edificio.
Por ejemplo:
- Sustitución de luminarias individuales.
- Reparación de pequeños elementos de fontanería.
- Ajustes menores en cerraduras, persianas o sistemas secundarios.
Sin embargo, en instalaciones clave (electricidad, climatización, seguridad, ascensores…) apostar solo por el correctivo es un error que puede derivar en costes más altos y riesgos de seguridad.
¿Qué tipo de mantenimiento necesita tu edificio?
La respuesta ideal suele ser una combinación de ambos.
- El mantenimiento preventivo debe aplicarse de forma regular sobre los sistemas críticos.
- El correctivo, en cambio, debe reservarse para intervenciones puntuales o urgentes.
Contar con un plan integral de mantenimiento te permitirá tener control, previsión y eficiencia en la gestión de tu edificio.
En AVANT Facility Services, diseñamos planes personalizados de mantenimiento integral, adaptados al tipo de inmueble, su uso, antigüedad y nivel de ocupación. Nuestra experiencia nos permite equilibrar prevención y reacción, garantizando siempre el mejor rendimiento de tus instalaciones.
Claves para implementar un plan de mantenimiento eficiente
1. Realiza una auditoría inicial
Analiza el estado actual del edificio y sus instalaciones para identificar puntos críticos.
2. Define un calendario de mantenimiento
Planifica las revisiones periódicas por tipo de sistema: climatización, electricidad, fontanería, seguridad, etc.
3. Usa tecnología de gestión
Incorpora herramientas digitales o software de mantenimiento (CMMS) para controlar tareas, incidencias y costes en tiempo real.
4. Confía en un proveedor especializado
Un partner de facility services como AVANT te ayuda a optimizar los recursos, mejorar la eficiencia energética y garantizar el cumplimiento normativo.
En resumen
El mantenimiento preventivo es la clave para alargar la vida útil de los equipos, reducir costes y asegurar la tranquilidad de los usuarios.
El correctivo, aunque inevitable en algunos casos, debe ser siempre el último recurso.
Invertir en un mantenimiento planificado no solo protege tus instalaciones, sino también tu inversión.
Contacta con AVANT Facility Services
En AVANT Facility Services te ayudamos a diseñar un plan de mantenimiento a medida para tu edificio o comunidad.
Nuestros técnicos especializados analizan tus necesidades y se encargan de que cada sistema funcione siempre en su punto óptimo.
🔧 Servicios personalizados de mantenimiento preventivo y correctivo
📍 Actuamos en toda la Comunidad de Madrid y alrededores
📞 Llámanos o escríbenos para una valoración sin compromiso:
🟢 WhatsApp: https://wa.me/34605822448
👉 Confía en AVANT Facility Services.
Cuidamos de tus espacios, y te ayudamos a elegir lo mejor.




